Este mes de diciembre son muchas las actividades relacionadas con la Navidad que estamos haciendo en clase . Esta tradición tan arraigada en nuestra cultura que no siempre se ha vivido de una manera tan materialista como ahora. Es cierto que vivimos en una sociedad capitalista cada día más consumista. Que comentamos sin ningún pudor que tenemos juguetes sin desempaquetar, ropa sin estrenar, que se come demasiado... Nos cuesta descolgarnos de todo el tinglado que hemos creado alrededor de esta celebración. Pero sería bueno que como educadores y padres nos planteásemos: qué hay que conservar de esta tradición y qué no. Nuestros niño@s se merecen esa reflexión.
En clase hablamos, no solo en Navidad, de lo importante que son nuestr@s abuel@s y la familia, de compartir con los otros, de compartir nuestro tiempo, nuestras vivencias, de crear vínculos con nuestros seres queridos y de crecer como personas. En resumen, valorar más lo que somos y no lo que tenemos. Dios nació en un pesebre.
También hacemos: manualidades, felicitaciones, ensayos, canciones, dibujos...
Que no nos impongan una "Navidad", creemos la nuestra.
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